Port Laredo: puerta comercial clave entre México y EU

El estratégico enclave de Port Laredo en la frontera entre México y Estados Unidos le otorga una singular importancia como punto de conexión para el comercio internacional. La privilegiada ubicación geográfica de Port Laredo facilita el flujo eficiente de mercancías entre ambos países, consolidando su posición como un centro vital para el intercambio económico.

Desde que fue construido en 2000, Port Laredo ha demostrado su relevancia en el ámbito comercial, atestiguando el auge del comercio entre México y Estados Unidos; fue concebido para aliviar la carga de los puentes congestionados por el tráfico transfronterizo de estos países, colocándose como un cruce terrestre muy activo en el intercambio de mercancías.

Sus instalaciones portuarias se han convertido en una arteria esencial para el movimiento de bienes, contribuyendo al crecimiento económico de ambas naciones. El prestigio comercial de Port Laredo se basa en su eficiencia operativa, la infraestructura moderna y su capacidad para gestionar un alto volumen de carga, consolidándolo como un actor clave en la cadena logística internacional.

En este cruce, exportadores de países como Colombia, Perú, Brasil, Chile y República Dominicana envían cada vez más productos por puertos mexicanos -como Lázaro Cárdenas, Manzanillo y Veracruz- para ser transportados por tierra hasta Laredo. Desde ahí, la carga entra a EU mediante un corredor y puente fluido que se ha convertido en un eslabón esencial de la cadena global de suministro.

Actualmente, el Puente del Comercio Mundial y la infraestructura de Port Laredo, procesan hasta 18,000 camiones por día, lo que representa casi 40% de todo el comercio terrestre entre EU y México. Tan solo en 2024, Port Laredo movilizó más de 339,000 millones de dólares (mdd) en mercancías, incluidos 210,800 mdd en importaciones y 128,300 mdd en exportaciones.