Impacto en el entorno laboral de la Ley Silla
A partir del 17 de junio, la Ley Silla obligará a los empleadores mexicanos a proporcionar asientos con respaldo y periodos de descanso a sus trabajadores durante las jornadas.

Una de las reforma a la Ley Federal del Trabajo en México, conocida como Ley Silla, entrará en vigor el próximo 17 de junio, por lo que todos los empleadores deberán garantizar periodos de descanso para sus trabajadores, además de proporcionar asientos con respaldo para el mismo fin.
La Ley Silla, aprobada y publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 19 de diciembre de 2024, obliga a los empleadores a ofrecer asientos con respaldo y periodos de descanso a aquellos trabajadores que realicen una jornada laboral de ocho horas; se buscan mejorar las condiciones laborales y proteger la salud de los empleados.
Principales puntos de la Ley Silla
- Obligación de las empresas de proporcionar un número suficiente de asientos o sillas con respaldo en los centros de trabajo
- Prohibición de obligar a los trabajadores a permanecer de pie durante toda la jornada laboral
- Necesidad de designar áreas específicas para descansos periódicos dentro de las instalaciones del lugar de trabajo
- Inclusión en los reglamentos internos de las empresas de normas que regulen el uso de los asientos y los periodos obligatorios de descanso
Además, se establece que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) tendrá 30 días, a partir de la entrada en vigor de la Ley Silla, para emitir normas complementarias sobre factores de riesgo relacionados con permanecer de pie durante largos periodos y en actividades laborales.
Rodrigo Cordera, militante de Movimiento Ciudadano y promotor de la iniciativa de ley, destacó las consecuencias negativas de permanecer de pie por largos períodos. “Ocho horas para permanecer de pie es explotación, solo imaginen a 30 años de trabajo, seis días a la semana, pocas vacaciones y ocho horas obligados a permanecer de pie, esto tiene que acabar, ya”.
Entre los problemas de salud relacionados con permanecer de pie de manera prolongada se encuentran la desaceleración del metabolismo, que puede derivar en resistencia a la insulina y diabetes, así como complicaciones en el sistema circulatorio y un mayor riesgo de infartos. La Ley Silla busca prevenir estos riesgos.
En caso de que los empleadores ignoren la Ley Silla y sus disposiciones, enfrentarían multas que van desde las 250 hasta las 2,500 UMAs (Unidad de Medida y Actualización), equivalentes a hasta 66,350 pesos de acuerdo con la última actualización. Las empresas reincidentes verían suspendidas sus actividades.
Durante su aprobación, se anunció que la Ley Silla estaría acompañada de inspecciones periódicas a los centros de trabajo para garantizar su cumplimiento y proteger los derechos laborales de los trabajadores. Esta nueva legislación representa un paso importante hacia una mejor calidad de vida y condiciones laborales más justas en México.