Retos y oportunidades en el transporte carretero mexicano
El transporte terrestre en México enfrenta desafíos en seguridad, congestión, sostenibilidad y escasez de conductores, mientras el e-commerce impulsa la demanda de servicios logísticos.

Con un mercado logístico que alcanzó una facturación de más de 5.35 billones de euros a nivel global, el transporte terrestre se mantiene como el más utilizado, representando más del 63.5% de las operaciones logísticas. En México, el transporte por carretera enfrenta desafíos y oportunidades que le darán forma en los próximos años.
La predominancia del transporte carretero se debe a su flexibilidad y alcance para entregas en corto y medio recorrido, características clave en un país con una vasta extensión geográfica como México.
Sin embargo, también enfrenta problemas de inseguridad en las carreteras, la congestión vial, la creciente escasez de conductores y la presión por mejorar la sostenibilidad.
Congestión vial y escasez de conductores
La congestión vial se ha convertido en uno de los principales obstáculos para el transporte terrestre en México. Las principales rutas del país, especialmente en áreas urbanas como la Ciudad de México y Monterrey, están saturadas, lo que ralentiza el flujo de mercancías y aumenta los costos logísticos.
Según un estudio reciente, la falta de conductores profesionales representa una crisis en el sector, agravada por la ausencia de incentivos y las condiciones laborales. Este panorama generará retrasos en el 20% de las entregas en México en este año, impactando directamente en la eficiencia logística.
Para mitigar estos desafíos, las empresas están comenzando a invertir en la automatización de vehículos, incluyendo la implementación de camiones autónomos. Esta tendencia busca mejorar el transporte terrestre y aliviar la presión generada por la escasez de conductores profesionales.
Auge del e-commerce e impacto en la logística mexicana
El crecimiento exponencial del comercio electrónico ha dejado una huella significativa en el ámbito logístico en México, generando una demanda creciente de servicios logísticos urgentes.
La presión para optimizar los tiempos de entrega, especialmente en lo que se conoce como la última milla, ha llevado a las empresas logísticas a adoptar tecnologías avanzadas. Se estima que el mercado de la última milla en América Latina crecerá un 12% anual, lo que representa una oportunidad y un desafío para el sector logístico en México.
Sostenibilidad, una necesidad imperiosa
La reducción de la huella de carbono en el transporte terrestre se ha convertido en una necesidad imperiosa en México. Este sector contribuye significativamente a las emisiones de gases de efecto invernadero, lo que ha llevado a las empresas a buscar formas de mitigar su impacto ambiental.
Compañías como Tesla y Volvo han comenzado a introducir camiones eléctricos en el país, con el objetivo de reducir las emisiones en un 30% en los próximos cinco años. Además, se están implementando flotas híbridas y se contempla la transición hacia combustibles más limpios, como el gas natural.
La revolución tecnológica está transformando la manera en que las empresas gestionan sus operaciones logísticas. El uso del Internet de las Cosas, la Inteligencia Artificial y el Big Data se han convertido en herramientas fundamentales para optimizar la eficiencia en el transporte terrestre. Muchas empresas en México ya están implementando estas tecnologías con el fin de enfrentar los desafíos inherentes a la logística moderno.
Adaptación y sostenibilidad
Las empresas que inviertan en tecnología, sostenibilidad y en mejorar las condiciones laborales de los conductores estarán mejor posicionadas para enfrentar los desafíos y aprovechar las oportunidades que trae consigo el auge del e-commerece y la globalización.
La capacidad de adaptación y la implementación de soluciones sostenibles definirán el rumbo del transporte por carretera en México en los próximos años.