Aumentaría inclusión financiera en México con más corresponsales bancarios
México aumentaría la inclusión financiera al expandir su red de corresponsales bancarios, a 300,000, para facilitar el acceso a servicios financieros en áreas rurales.
México tiene un gran potencial para aumentar su inclusión financiera y llegar a aquellos sectores de la población que aún enfrentan dificultades para acceder a los servicios financieros. A pesar del avance en la digitalización, todavía hay una brecha significativa entre las áreas urbanas y rurales.
Actualmente, el país cuenta con 50,000 corresponsales bancarios, concentrados sobre todo en las principales ciudades. Esto contrasta con países como Colombia, que tiene una población menor pero casi el triple de corresponsales. La meta es alcanzar los 300,000 corresponsales en México para ampliar el acceso a los servicios financieros.
Según la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) 2024, entre 2018 y 2024, solo entre 40 y 44% de la población adulta utilizó los servicios de corresponsales bancarios en México. Aunque este canal ofrece una alternativa más cerca a la la población adulta, la brecha de uso entre zonas urbanas y rurales muestra una diferencia de casi 18%.
Las áreas rurales enfrentan mayores desafíos para acceder a los servicios financieros debido a la lejanía geográfica y a la falta de infraestructura. La ENIF también revela que las sucursales bancarias son el canal más alejado para la población, con 22 minutos de traslado en 2024. Los corresponsales son el canal más cercano, con 12 minutos de recorrido.
El potencial del retail fintech
Las tiendas de conveniencia, abarrotes, farmacias y otras cadenas comerciales representan una oportunidad significativa para impulsar la inclusión financiera en México. Con más de 2 millones de tiendas de conveniencia en el país, estas podrían convertirse en corresponsales bancarios, ofreciendo servicios financieros a su clientela.
La introducción del retail fintech en este contexto permitiría a las personas realizar operaciones financieras sin necesidad de trasladarse largas distancias. Este modelo también generaría ingresos adicionales para los dueños de negocios y fortalecer la economía local.
La población rural, en particular, se beneficiaría de esta opción, ya que tendría acceso a servicios financieros más cercanos a su lugar de residencia. Es necesario impulsar políticas públicas y estrategias que promuevan la inclusión financiera en México, especialmente en las áreas rurales.
El desarrollo de una infraestructura financiera robusta, junto con la innovación tecnológica y el empoderamiento de los agentes locales, serán claves para lograr este objetivo. La inclusión financiera no solo beneficia a las personas, sino también al desarrollo económico y social del país.
