Este es el camino hacia la logística 5.0
Expertos coinciden en que la evolución ya está en marcha y que la logística 5.0 integrará tecnologías aún más avanzadas con un enfoque humano y sostenible.

La transformación digital del transporte de mercancías se erige como un desafío estructural, pero también como una de las principales vías para alcanzar la eficiencia, trazabilidad y sostenibilidad en las cadenas de suministro. Expertos coinciden en que la evolución ya está en marcha y que la próxima etapa, conocida como logística 5.0, integrará tecnologías aún más avanzadas con un enfoque humano y sostenible.
Los ejes de esta nueva etapa serán: autonomía, con vehículos inteligentes, drones de entrega y sistemas que toman decisiones operativas sin intervención humana directa; electrificación, con la transición hacia flotas eléctricas para reducir la huella ambiental del transporte; digitalización total, con la interoperabilidad entre sistemas TMS, WMS, ERP y plataformas de Inteligencia Artificial; y sostenibilidad, con la trazabilidad de emisiones, el cumplimiento ESG y el uso de métricas verdes como parte del desempeño logístico.
La Inteligencia Artificial jugará un papel fundamental en la predicción de la demanda, la identificación de patrones logísticos y la automatización de decisiones. Sin embargo, se advirtió en el webinar TMS y Facturación en el Transporte, organizado por el capítulo México de CSCMP, en colaboración con académicos y profesionales del sector, que esta tecnología solo es útil si se alimenta de datos confiables y estructurados, lo que refuerza la importancia de contar con plataformas como el TMS.
El Transportation Management System, TMS, se posiciona como uno de los pilares fundamentales de esta transformación digital. Al alojarse en la nube, permite escalabilidad según las necesidades del negocio, agregar nuevos módulos o funciones sin grandes inversiones, y operar desde cualquier ubicación con conexión a internet. Esta flexibilidad es especialmente valiosa para empresas con operaciones distribuidas o en expansión.
A pesar de sus beneficios, la implementación de un TMS no está exenta de desafíos. Entre los más relevantes, los especialistas señalaron la resistencia al cambio por parte del personal operativo y la falta de una visión clara sobre los objetivos del sistema. En muchos casos, los errores en la adopción provienen de una comunicación deficiente entre el área técnica que implementa el sistema y los usuarios que lo operan.
La clave reside en contar con equipos de implementación sólidos y con experiencia en procesos logísticos, capaces de traducir las necesidades del negocio en configuraciones funcionales del sistema, así como de ofrecer acompañamiento durante el proceso de adaptación. “La tecnología por sí sola no transforma; necesita de personas capacitadas y comprometidas con la mejora continua”, se afirmó.
El webinar cerró con una frase que sintetiza el nuevo paradigma del transporte: Lo que no se mide, no se puede mejorar. La gestión logística moderna requiere no solo mover mercancías, sino comprender los datos que esos movimientos generan para tomar decisiones más ágiles, precisas y rentables. Implementar un TMS es entrar en una lógica de operación basada en datos, colaboración y mejora continua.