Capacitación ambiental, clave para una IAGen sostenible en empresas
La capacitación del personal de una empreesa sobre el uso responsable de la Inteligencia Artificial es crucial para mitigar su impacto ambiental, promoviendo una cultura digital sostenible.

En el panorama actual, marcado por la rápida evolución tecnológica y la creciente implementación de herramientas basadas en Inteligencia Artificial Generativa (IAGen), es crucial que las empresas adopten una postura proactiva hacia la tecnología con propósito. Esta implicación no solo se limita a incorporar estas tecnologías en los procesos productivos, sino también a formar a los empleados para un uso responsable y consciente de la IAGen, minimizando su impacto ambiental.
A pesar de esfuerzos como las Normas de Información de Sostenibilidad (NIS) en México, incluso el Día de la Tierra internacional, los cuales buscan fomentar la transparencia en materia ambiental y social entre las empresas, todavía existe una brecha entre la conciencia sobre la sostenibilidad y su implementación efectiva en los ámbitos laboral y personal.
La acelerada automatización y la incorporación de tecnologías como la IAGen plantean nuevos desafíos para la cultura digital y, por ende, para el consumo responsable de recursos tecnológicos. Los usuarios juegan un papel fundamental al interactuar con la IAGen, generando grandes cantidades de datos que requieren energía no renovable para su procesamiento y almacenamiento.
Este impacto ambiental, a menudo invisible, se traduce en un costo financiero y pone de manifiesto la necesidad de fomentar un uso consciente de la tecnología. De manera similar a como se reflexionó sobre la impresión en papel, es crucial promover prácticas que minimicen el impacto digital de nuestras acciones online.
Preguntas para generar conciencia
Para avanzar hacia un uso más responsable de la tecnología, es importante plantearse una serie de preguntas que nos ayuden a reflexionar sobre nuestro comportamiento digital:
- ¿Tienen los correos o consultas que generamos un propósito u objetivo definido que justifique el uso de recursos?
- ¿Existe una razón para generar comandos o prompts que soliciten respuestas extensas que serán almacenadas en la nube?
- ¿La redacción de mensajes instantáneos, las reacciones y el uso de elementos multimedia son realmente necesarios o se utilizan indiscriminadamente?
- ¿Las fotos y videos, generados o no con IAGen, que se almacenan en la nube son realmente necesarios? ¿Se evita la duplicidad de archivos?
- ¿Aportan valor a la conversación las publicaciones y comentarios en redes sociales?
El papel de las organizaciones en la acción positiva
En definitiva, la cultura digital que cultivamos como individuos y empresas tiene un impacto significativo en el medio ambiente. Es fundamental adoptar prácticas que promuevan la sostenibilidad para evitar consecuencias negativas en los ámbitos social y ambiental. Las empresas tienen una responsabilidad crucial en este cambio cultural.
La función de Recursos Humanos debe apoyar en la capacitación urgente del personal para prevenir que la falta de una cultura digital y conciencia ambiental acelere su impacto negativo. Es necesario liderar con el ejemplo, mostrando un verdadero compromiso con la definición de planes, políticas y lineamientos de trabajo que promuevan el uso apropiado y racional de la tecnología.
Promover la tecnología con propósito implica ir más allá del simple desarrollo e implementación de herramientas tecnológicas. Se trata de construir una cultura organizacional que valore la sostenibilidad, la responsabilidad ambiental y el bienestar social. Al empoderar a los empleados con conocimientos y recursos para un uso consciente de la tecnología, las empresas contribuyen a crear un futuro más sostenible y equitativo.
En este sentido, es vital que las empresas se involucren en iniciativas que reduzcan su huella ambiental y promuevan la conciencia sobre el cambio climático. Desde la implementación de prácticas sostenibles en la cadena de suministro hasta la promoción de programas de educación ambiental para sus empleados, cada acción cuenta.