Retrasan aranceles automotrices a México y Canadá por presión empresarial
El presidente Donald Trump pospone un mes los aranceles a la industria automotriz de México y Canadá, lo que representa un alivio para las empresas y les da un margen para adaptarse a nueva regulaciones.

El presidente Donald Trump, prorrogó un mes la implementación de aranceles del 25% al sector automotriz de México y Canadá. Esta medida fue acordada después de diálogos con los fabricantes de automóviles, por lo que la nueva fecha límite para la aplicación de aranceles será el 2 de abril próximo.
La decisión generó un alivio temporal en el sector automotriz, que ha estado bajo presión debido a la amenaza de tarifas elevadas y porque el presidente aseguró que las fábricas regresarían a EU. Además, persiste la incertidumbre sobre las medidas específicas que se implantarán posteriormente, incluida la posibilidad de aranceles adicionales.
A pesar de esta prórroga, la administración de Trump dejó abierta la opción de considerar más excepciones a la aplicación de aranceles, lo que indica que el tema sigue siendo objeto de negociación constante, pese a que el también empresario afirmó que los aranceles "protegen el alma de Estados Unidos".
Así lo mencionó este martes en el Capitolio frente a congresistas y senadores, reportaron medios internacionales. Señaló que antes, México y Canadá y muchos países usaban los aranceles "en contra nuestra, ahora nosotros los usamos”, y a pocas horas de haber entrado en vigor, dijo que habrá “un poco de turbulencia, pero no será mucha”.
Cabe mencionar que no todo será fácil para Trump al implementar los aranceles, pues el ministro de Ontario, Canadá, Doug Ford, respondió a los aranceles y anunció la aplicación de tarifas a la producción eléctrica de Estados Unidos.
De acuerdo con el Wall Street Journal, la provincia de Ontario aplicará una tarifa de 25% a las exportaciones de energía eléctrica que manda a Minnesota, Wisconsin y Nueva York, sede de la Torre Trump, propiedad del mandatario estadounidense.
Ontario también ha prohibido a todas las empresas con sede en Estados Unidos firmar contratos gubernamentales, y Ford ha rescindido el contrato de su provincia con Starlink. Además, se planea ‘cortar’ el suministro de níquel y empezar a venderlo a otros mercados.