México entraría en recesión pero no en crisis financiera profunda

UBS afirma que México enfrentaría una recesión económica debido a los aranceles de Estados Unidos, pero no una crisis financiera profunda gracias a su solidez macroeconómica.

La incertidumbre económica que rodea a México se intensifica debido a las tensiones comerciales con Estados Unidos, lideradas por las medidas arancelarias del presidente Donald Trump. Sin embargo, la firma suiza UBS afirma que aunque el país entraría en una recesión, esta no representaría una crisis como la de 1994 u otros años.


En el informe México: La recesión no es una crisis, UBS destaca la diferencia entre una recesión cíclica, caracterizada por una desaceleración temporal de la actividad económica, y una crisis financiera o económica, que implica el colapso del sistema financiero, devaluaciones abruptas de la moneda y dificultades para afrontar la deuda pública o corporativa.


A pesar del escenario actual, la firma suiza señala que México cuenta con sólidos fundamentos macroeconómicos que reducen significativamente la probabilidad de una crisis. Entre estos fundamentos, resalta un déficit en cuenta corriente inferior al 0.5% del PIB, una deuda externa contenida y un régimen cambiario flexible.


Adicionalmente, la baja proporción de deuda pública en moneda extranjera, equivalente solo al 30% del total, se contrasta con el 80% registrado hace tres décadas. La deuda pública total, que representa el 52% del PIB, también se encuentra por debajo de los niveles observados en economías latinoamericanas como Argentina, Brasil o Colombia.


México cuenta con una línea de crédito flexible del Fondo Monetario Internacional (FMI) por 35,000 millones de dólares, destinada exclusivamente a países con políticas macroeconómicas responsables. Esta disposición, junto a la independencia del Banco de México (Banxico), refuerza la estabilidad económica del país.


En cuanto al tipo de cambio, UBS estima que la incertidumbre comercial con Estados Unidos limitaría la apreciación del peso mexicano, pero no representa un riesgo sistémico para la divisa. Se proyecta un nivel de 20.7 pesos por dólar para el segundo trimestre de 2025, 20.2 en el tercer trimestre y 20 hacia el cierre del año.


Esta perspectiva se contrapone a las preocupaciones expresadas por la OCDE, que advierten una profunda recesión en México con una contracción de 1.3% para 2025. Mientras tanto, agencias como Fitch Ratings coinciden con UBS en un crecimiento nulo para el país en 2024, alejándose del mínimo crecimiento de 2.5% esperado por el gobierno mexicano.

Compartir: