Sector financiero de LatAm, clave para liderar transición sostenible
Las finanzas sostenibles son clave en México y Latinoamérica para impulsar el desarrollo económico y enfrentar la crisis climática, redirigiendo recursos a proyectos ambientalmente responsables.

Ante los crecientes desafíos del cambio climático en el mundo, el sector financiero en México y Latinoamérica se presenta como un actor clave para liderar la transición hacia un futuro sostenible.
Esta región, con su vasta riqueza en recursos naturales, enfrenta desigualdades estructurales, pero al mismo tiempo cuenta con el potencial para implementar finanzas sostenibles que impulsen el desarrollo económico y enfrenten la crisis climática de manera simultánea.
Si bien el concepto de un sistema financiero verde no es reciente, su relevancia ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años. Esta perspectiva tiene como objetivo redirigir los flujos de capital hacia proyectos y empresas que generen beneficios tanto ambientales como sociales.
En términos prácticos, esto se traduce en el uso de instrumentos y estrategias como los bonos verdes, los mercados de carbono y las inversiones de impacto, que están ganando prominencia en la región.
La taxonomía sostenible en México
Un claro ejemplo del compromiso por promover las finanzas sostenibles es la implementación de la Taxonomía Sostenible, desarrollada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público de México (SHCP). Este marco normativo tiene como objetivo clasificar actividades económicas que contribuyan a objetivos ambientales y sociales, brindando mayor claridad y confianza a los inversionistas.
Al definir qué proyectos son considerados sostenibles, esta taxonomía no solo fomenta la transparencia, también impulsa la movilización de recursos hacia sectores fundamentales como la energía renovable, la infraestructura resiliente y el transporte limpio.
Estas iniciativas representan un paso significativo hacia la creación de un sistema financiero más responsable y orientado hacia la sostenibilidad. La movilización de recursos hacia proyectos que generen un impacto positivo en el entorno no solo contribuye a la mitigación de los efectos del cambio climático, sino que también abre nuevas oportunidades de desarrollo económico y empleo en la región.
En este contexto, es fundamental el compromiso conjunto de todos los actores involucrados en el ámbito financiero, gubernamental y empresarial para impulsar las finanzas sostenibles como un vector de cambio en México y América Latina.
Asimismo, la colaboración entre el sector público y privado, así como la participación activa de la sociedad civil, serán esenciales para construir un futuro más sostenible y equitativo para las generaciones presentes y futuras.