La proteína dulce que cambiaría la industria alimentaria
Oobli produce proteínas dulces naturales llamadas brazzeína que reemplazan el azúcar sin afectar el nivel de glucosa en sangre y abren camino a alimentos más saludables.
La búsqueda constante por alternativas al azúcar tradicional ha llevado a innovaciones sorprendentes en el campo de la tecnología alimentaria. Una de estas novedades proviene del oubli, una fruta tropical ultradulce proveniente de África Occidental, que contiene un tipo especial de proteína dulce conocida como brazzeína; es capaz de emular el sabor del azúcar sin los efectos negativos en la salud y ha llamado la atención de empresas como Oobli, con sede en California.
Oobli utiliza técnicas de fermentación de precisión para producir a gran escala estas proteínas dulces. Según Jason Ryder, fundador y director de tecnología de Oobli, "como evolucionaron junto a nosotros para engañarnos haciéndonos creer que eran azúcar, actúan sobre nuestros receptores del gusto dulce de forma muy similar. Pero después, se digieren igual que otras proteínas".
Este proceso ofrece una opción saludable al azúcar convencional, ya que las proteínas dulces no afectan el nivel de azúcar en sangre, reduciendo así el riesgo de problemas de salud. La tecnología de Oobli ha generado gran interés en la industria alimentaria. En 2024, después de que la FDA revisara los datos de seguridad de dos proteínas de Oobli sin presentar objeciones, otras empresas del sector intensificaron su investigación y desarrollo con esta compañía.
Estas proteínas dulces tienen el potencial de sustituir hasta 90% del azúcar en una variedad de alimentos y bebidas, gracias a su excepcional dulzor, que puede ser hasta 5,000 veces mayor que el del azúcar. A pesar de su origen natural y las ventajas para la salud, estas proteínas dulces logran competir en precio con el azúcar tradicional debido a su alta eficiencia de producción.
Esta característica hace que sean altamente atractivas para los fabricantes de alimentos, quienes pueden aprovecharlas para reducir costos y ofrecer productos más saludables a sus consumidores. Además, estas proteínas permiten incorporar otros nutrientes valiosos a las recetas, como fibra adicional, mejorando aún más la calidad nutricional de los alimentos.
Oobli tiene su propia línea de chocolates con estas proteínas dulces, demostrando el potencial de esta tecnología en diversos productos. A su vez, diversas marcas globales, incluyendo Grupo Bimbo, una de las empresas de productos horneados más grandes del mundo, se preparan para incorporar estos ingredientes, lo que indica una tendencia hacia la adopción masiva de dichas proteínas en la industria alimentaria global.
